Los experimentos llevados a cabo con la lectura a través de ordenador, en Internet, revelan que estos usuarios retienen menos contenidos que aquellos que efectúan una lectura a partir de un medio analógico o impreso.
Así en un estudio de contraste entre dos grupos que escuchaban la misma conferencia, al primer grupo se le permitía el uso del ordenador para ahondar en aspectos de la propia temática de la conferencia, el segundo debía atender exclusivamente al experto. Los resultados en comprensión fueron favorables al segundo grupo. El primero efectuaba las actividades habituales a las que nos entregamos en Internet como la compra on line, inicio de sesión en la red social, búsqueda en Google de temas de la charla, etc.
También en actividades de recuerdo que tienen que ver con el argumento de obras de ficción, el grupo que accede a un texto impreso lineal obtiene mejor resultado que el que lee el texto a través de hipervínculos.
No todo son débitos en este somero repaso del aprovechamiento de la lectura a través de Internet. Las capacidades en que este incide positivamente van desde el reconocimiento de formas similares, la rapidez y reflejos en la evaluación de sitios web, a la resolución de problemas puntuales, pero desde luego el desarrollo de aquellas está a favor del libro en las cuestiones relativas al léxico, la cultura, la memorización, la aritmética… (Nicholas Carr, Superficiales ) Continuar leyendo