De plagios y demás villanías

Todo habitante de la red bloguera sabe, o debe saber, que pertenece a una comunidad de vecinos, muy grande, sí, pero comunidad al fin y al cabo. Así que la buena convivencia en ella es un asunto prioritario. Existen una serie de normas no escritas que todo buen vecino ha de cumplir. Algunos lemas sirven como preceptos, como hábitos, de buena conducta. Es cierto que el “todo es de todos” es uno de ellos, pero debería ser practicado con elegancia, honestidad y buena vecindad. Apropiarse de las ideas de otros y ofrecerlas como propias tiene nombre, es un plagio, una inelegancia propia de viles y chapuceros.

Está claro que una de las esencias de los blogs es beber de las fuentes de otros. Enriquecerse con otras experiencias nos hace mejores y esa generosidad recibida se hace completa cuando los otros beben de ti mismo. Pero la honradez del buen bloguero hace citar las fuentes de ideas y las alaba, si es el caso, sin dejar de olvidarse de que la originalidad pertenece solamente a uno: al autor.

Y todo esto viene al caso de que recientemente un blog amigo ha sido suciamente copiado y sus ideas han sido ofrecidas como propias por otro. Mal vecino, este último, que ha obviado señalar al autor de sus no ideas.  ¡Eso no se hace, está muy feo!

Compartir es lo que hacemos cada uno de nosotros cuando publicamos una reflexión, un comentario, unos ejercicios, unos apuntes… pero atribuirse el trabajo de otro y firmarlo como propio es una felonía inaceptable.

Decía Albert Einstein que el secreto de la creatividad es saber esconder tus fuentes. Vale, de acuerdo, mas no robarlas y ponerlas entre tus méritos.

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2 comentarios a De plagios y demás villanías

  1. jlacruzs escribió:

    Pues creo que tienes toda la razón, leemos, creamos, compartimos y, si no es nuestro, totalmente o en parte, citamos las fuentes. ¡Es lo más natural!

    Un saludo y enhorabuena por tu blog.

    José Mari.

  2. josepe escribió:

    joé, ¡qué bien escribes!

    ¡qué envidia!

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