Desde el comienzo del presente curso estamos trabajando en el colegio para aprender y poner en práctica otras metodologías. En ocasiones nos cuesta cambiar, por miedo a lo que no conocemos o dominamos. Por eso nuestra compañera María Aguirre, orientadora educativa, imparte un seminario denominado “HACIA UNA METODOLOGÍA INCLUSIVA: DOCENCIA COMPARTIDA Y TRABAJO EN GRUPO”.
Todo ello se expone en la página de este blog:
“FORMACIÓN: METODOLOGÍA INCLUSIVA” y en las páginas enlazadas “DOCENCIA COMPARTIDA“, “PENTACIDAD” Y “TRABAJO EN GRUPOS“, desglosada en grupos colaborativos, interactivos y tutoría entre iguales.
Actualmente estamos en la fase de prácticas.
Estimados compañeros y compañeras, hermanos en la blogosfera, os he dejado en la dirección de abajo un premio a vuestra labor. No tiene dotación económica pero sí una gran carga de agradecimiento y admiración por mi parte. Espero que os haga tanta ilusión recibirlo como a mí entregarlo.
El protocolo del premio marca que habléis algo sobre vosotros y los reconcedáis a vuestros blogs favoritos en una cadena de reconocimiento mutuo que nos recargue de energía.
Un abrazo.
http://orientafer.blogspot.com.es/2013/03/premios-versatile.html
El modelo inclusivo se ha intentado imponer por decreto, sin que la sociedad en su conjunto ni muchos de los que lo tenían que aplicar estuvieran convencidos o preparados para hacerlo, y se ha aplicado conservando muchos de los rasgos de la escuela tradicional, entre ellos la mayoría de las prácticas que conducen inevitablemente a la selección. Desde el momento en que los alumnos se agrupan por cursos, siguiendo el criterio de tener la misma edad, y el Estado fija unos conocimientos mínimos que todos deben alcanzar en cada nivel, ya se está desvirtuando la esencia de la inclusión.
Ante lo contradictorio de la situación, en la que al final priman más los resultados que los procesos, se buscan todo tipo de fórmulas y de apaños, manteniendo la ilusión o la apariencia de que se atiende a la diversidad, cuando lo que se está practicando son distintas formas encubiertas de selección, acompañadas de una tendencia creciente hacia la igualación a la baja.
Por citar algunos ejemplos: las exigencias se reducen para que haya más que las puedan satisfacer; los profesores tienden a delegar su responsabilidad en los especialistas y solicitan que los alumnos con dificultades manifiestas sean atendidos privadamente, fuera del aula; cuando es posible, los grupos se dividen en otros grupos más pequeños, buscando que el nivel académico de los alumnos sea lo más homogéneo posible o intentando aislar o neutralizar los alumnos más problemáticos o conflictivos; mientras que la ley lo permita, se busca el momento más idóneo para que los alumnos repitan curso, con la esperanza de que maduren, se solucionen sus dificultades o recuperen el retraso. Incluso los padres son selectivos, buscando aquellos colegios donde consideran que es más alto el nivel y menor la conflictividad, lo que dichos colegios consiguen a base de seleccionar los alumnos que contribuyan a ello y denegar la plaza a aquellos que no se ajustan a cierto perfil. Todo ello sin cuestionar la premisa principal: para seguir estudiando, una vez terminada la enseñanza obligatoria, es necesario haber demostrado que se saben ciertas cosas.
http://www.otraspoliticas.com/educacion/%C2%BFinclusion-o-seleccion